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🌈 Cass is back, alright! 🌈

El final del arcoíris es un lugar de ilusión y fantasía. Allí vivía en un chalet gigante con 30 jacuzzis, peinaba crines de unicornio, y contemplaba auroras boreales en cada atardecer. Pero es también un lugar aburrido de cojones, sin Netflix, sin HBO Max, sin Apple TV, sin genitales, sin triples Whopper, sin Bershkas, sin afters, sin posters de Christian Bale. Solo con Amazon Prime capado, sesión continua de los Anillos de Poder, y sin poder hacer compritas porque tienen la desfachatez de no enviar a dimensiones desconocidas.

Llevo años sin comprarme un croptop nuevo -Marquitos, yujuuuuuu-, me he quedado sin motivos para permanecer en mi retiro, y como espere un poquito más voy a quedarme sin lifting de gratis con sabor a chumbera.

Así que… mundo! He vuelto! Intentando sobrevivir al shock de que mi hermano tenga pelos en los huevos, y que mi madre haya intentado sustituirme fabricando una versión 2.0 de mí misma con los ojos más bonitos. Echando de menos cepillar las crines de mis 666 unicornios, y recaudando fondos para la compra de un Satisfyer.

Pero para lo de los unicornios tengo soluciones de genia…


Nota a pie de página: el único que estaba bueno era el Kevin!